Ejercicio terapéutico para el dolor lumbar: guía para moverte sin miedo

FotosPaulayJuan-6 (2)

El dolor lumbar es una de las molestias más comunes en la población adulta. Ya sea por sedentarismo, una mala postura en el trabajo o un movimiento brusco, la zona baja de la espalda suele resentirse. Pero lo que muchas personas no saben es que moverse de forma guiada y segura es parte de la solución. Aquí te contamos cómo el ejercicio terapéutico puede ayudarte a recuperar tu bienestar.

¿Qué es el dolor lumbar y por qué aparece?

  • Causas comunes: sedentarismo, debilidad muscular, hernias discales, estrés, malas posturas o movimientos repetitivos.
  • Dolor agudo vs. Crónico: el agudo suele durar menos de 6 semanas; el crónico, más de 3 meses.
  • Consulta previa: es fundamental un diagnóstico profesional antes de iniciar una rutina, para descartar causas graves.

 

¿Qué es el ejercicio terapéutico?

Se trata de una modalidad de ejercicio prescrita y supervisada por profesionales de la salud, especialmente fisioterapeutas. Su objetivo no es solo aliviar el dolor, sino mejorar la función, prevenir recaídas y promover una recuperación activa y duradera.

 

Beneficios del ejercicio terapéutico para el dolor lumbar

  • Disminuye el dolor y mejora la tolerancia al movimiento
  • Fortalece los músculos estabilizadores del tronco
  • Mejora la flexibilidad y el control motor
  • Reduce la ansiedad asociada al dolor
  • Promueve la independencia funcional

 

Ejercicios recomendados y seguros para la zona lumbar

Estos ejercicios están diseñados para activar la musculatura profunda sin generar carga excesiva sobre la columna. Se recomienda realizarlos con supervisión profesional al inicio.

 

  • Puente de glúteos

Recuéstate boca arriba, con las rodillas flexionadas. Eleva la pelvis lentamente activando glúteos y abdomen.
Series: 2 a 3 de 10-15 repeticiones.

 

  • Bird-Dog

      Desde posición en cuatro apoyos, extiende brazo derecho y pierna izquierda. Mantén el equilibrio unos segundos y cambia de lado.

      Series: 2 a 3 de 8 repeticiones por lado.

       

      • Estiramiento gato-vaca

      En posición de cuadrupedia, alterna entre arquear la espalda hacia arriba (como un gato) y hacia abajo (como una vaca), respirando de forma fluida.

      Series: 1 a 2 series de 10 repeticiones lentas.

       

      • Plancha modificada

      Apóyate sobre los antebrazos y rodillas. Mantén el cuerpo alineado, sin arquear la espalda. Contrae el abdomen y respira con control.

      Duración: 3 repeticiones de 15–30 segundos.

       

      ¿Cuándo evitar el ejercicio y consultar al especialista?

      Detén cualquier actividad y busca atención médica si experimentas:

      • Dolor que se irradia hacia una pierna
      • Pérdida de fuerza o sensibilidad
      • Incontinencia urinaria o fecal
      • Dolor que no mejora con reposo relativo

       
      Recomendaciones adicionales

      • No permanezcas en cama más de 1 o 2 días
      • Introduce el movimiento progresivamente
      • Evita ejercicios de impacto o torsión iniciales
      • Trabaja también tu postura diaria y ergonomía
      • Consulta siempre con un fisioterapeuta para adaptar el plan a tu caso

       

      Conclusión

      El ejercicio terapéutico es una herramienta segura, efectiva y respaldada por la ciencia para el manejo del dolor lumbar. No dejes que el miedo al movimiento te limite: con la guía adecuada, moverse es parte de la solución.



      ¿Tienes dolor lumbar?

      Descarga la App Bodytech y accede a rutinas guiadas por fisioterapeutas y médicos deportólogos. Recupera tu bienestar desde casa o agenda una cita presencial con nuestros expertos.

       

      Referencias

      • van Middelkoop, M., et al. (2011). Exercise therapy for chronic nonspecific low-back pain. Cochrane Database of Systematic Reviews.
      • Hayden, J. A., et al. (2005). Exercise therapy for treatment of non-specific low back pain. BMJ, 332(7532), 139.
      • Searle, A., et al. (2015). Exercise interventions for the treatment of chronic low back pain. British Journal of Sports Medicine, 49(6), 398-403.

      Compartir en redes